Seis tipos de hombres a los que deberíamos mandar a la porra

MODELOS DE HOMBRES 
Y HOMBRES NO MODELOS

Por Erika Medina Arteaga

Desde galanes de pueblo y “gomelos de vereda”, hasta los que tienen delirio de traqueto y de “ser diferentes” desde los especialistas en ciencia ficción y reyes del drama hasta los peligrosos enredadores enredados. Seis clásicos personajes masculinos, a los que vale la pena huirle, descritos a continuación:

Chayannebaygonsapiens 

Especialistas en retórica y doctores en artes escénicas, amantes en su mayoría del vallenato “de la nueva ola” y de cualquier canción a la “moda”, afortunadamente ya en peligro de extinción gracias al oído “anti-parla” entrenado en ciertas mujeres. Los “tumbalocas” por excelencia, que quieren arrasar con cualquier escoba con falda a la vista y se enamoran 3 veces al día. Los clásicos que cuando los pillan en cualquier asunto turbio, van a pedir perdón acompañado de mariachis, oso gigante peludo, cajas de Ferrero roché y ramo de rosas rojas con aroma a talco de bebé, si, esos que saturan el muro de la novia con dedicatorias y bajo cuerda el inbox de otras tres. “Apuesto a que te llamas Google, porque tienes todo lo que busco” y “te juro que es solo una amiga mi amor” son algunas de sus frases más representativas.


Complejodetraquetosapiens

Así como los chayannebaygonsapiens aseguran solucionar sus embarradas con esos regalos que las “deja muertas”, este nuevo grupo de hombres cree que todo se soluciona o se compensa con plata; con más bajo nivel intelectual que los anteriores e influenciados culturalmente por el reggaetón y la música de cantina, son los típicos que babean con la vieja del cabello hasta la raja, con “bubbies” de silicona que parecen amígdalas inflamadas y grasa en la cola sin piedad que hace las veces de repisa. Maestros en regalos suntuosos, nada sobrios y muy poco sencillos, como ellos. Esa variante se dio y sigue vigente gracias al gran trabajo del famoso clan de las “bendecidas y afortunadas”, las aspirantes por excelencia a ser mantenidas y a no hacer el más mínimo esfuerzo por ser exitosas académica y laboralmente, esas mismas que se dejan comprar con cualquier bolsito de marca y un “iphonsito” con forro de peluche y diamantes a cambio de cualquier pruebita de amor, ¡qué grandes!


Hablando de la ausencia de sencillez, pero pasando de lo ordinario a la clase, a esa clase mamerta y pesada, he aquí los máximos exponentes, los Ustednosabequiensoyyosapiens. Hombres en su mayoría originarios de las capitales, criados en una familia especializada en malcriarlos y hacerlos unos buenos para nada, que creen el mundo entero debe estar rendido a sus pies gracias a su “poder”. Aburridores como ellos solos, convencidos que Dios hizo a los hombres a su imagen y semejanza, porque después de su cara y “style” no existe nadie mejor, por lo que no conciben la idea que alguna mujer no les pare bolas. Suelen amenizar sus charlas con experiencias de borracheras sin fin, paseos en su lancha en barú, de las viejas que se derriten por ellos, de los exitosos que son papi y mami, y lo peor, con ese habladito de la “papa en la boca” que me saca corriendo al instante: “Juandi hueo’n qué risa”.


Hipersensiblesapiens

Esta tipología no tiene nada que ver con los esos hombres maravillosos que demuestran sus sentimientos a flor de piel. A los hipersensiblesapiens se le conoce comúnmente como “las mujeres de la relación”, no en un sentido machista sino porque pareciera que los que menstruaran fueran otros... Exagerados a morir, no se les puede decir casi nada y lo que se diga o se haga debe ser con un tacto y un cuidado incalculable porque tienden a tomarse todo personal, además a renunciar a su vida para vivir en torno a la de su pareja o traga, pues no hacen nada más que complacer sus caprichos, seguir su sombra y ponerla en un altar. La acciones rutinarias siempre van en su contra “¿Por qué te cambiaste los aretes que te regalé, ya te parecen insuficientes los regalos que te doy?” Sienten que siempre se la están jugando: “ayer soñé que era un toro con unos cachos bien grandes, ¿no hay algo que me quieras contar? Tim Burton les queda pendejo para inventar películas y Juan Fernando Velasco corto para hablar de tusas, porque de hecho somos nosotras las culpables de romperles el corazón por ellos haber renunciado a su vida, ¡qué tal!

Este es el momento en el que nace el siguiente clan, hombres revelados y cansados de entregarse sin ser correspondidos, que adoptan el rol de chicos malos, convencidos que los hará irresistibles, ja-ja. Los Hipstersobradorsapiens son hombres medianamente inteligentes, con un buen look, en su mayoría animalistas, con conciencia social y algún talento desarrollado que les ayuda en su plan de seducción, tácitamente caballerosos –para no demostrar mucho- y fieles representantes del amor sin compromiso, -para parecer más interesantes- Preparados mentalmente para lucir fríos y sin sentimientos pero siempre preparados para cualquier aventurilla, con un gran complejo de parecer diferentes, locos, de mente abierta, y divertidos, pero son simples estrategias que posiblemente esconden su constante inseguridad y miedo al rechazo. “Trátelas mal y vera que ahí las tiene” es su brillante lema de vida y frase de cajón favorita.

Intelectocomplicadosapiens

La ultima clasificación, los Intelectocomplicadosapiens parecieran a simple vista que salvaran la patria en medio de tanto fiasco. Son románticos sin ser empalagosos, peligrosamente seductores y brillantes, con buen sentido del humor e independientes pero con muchos dilemas y conflictos internos originados por su imaginación (o sus bobadas), que ni resuelven ni quieren resolver, todo para evadir cualquier relación porque saben y se convencieron de que son un desastre en el amor. Aparecen y desaparecen por arte de magia porque nunca tienen claro qué es lo que quieren con su vida y mucho menos con las mujeres, “no eres tú, soy yo”, “estoy pasando por un momento muy complejo de mi vida y no quisiera hacerte daño”, “eres mucha mujer para mí, busca nuevos horizontes” son sus frases célebres más comunes, muchas veces para quitarse de encima cualquier descache o hastío. Sin duda brillantes. 

Ese hombre inteligente, cariñoso, sencillo, cálido, fiel y visionario que encuentra el punto medio entre lo dulce y lo ácido, que nos complace sin traicionar su criterio, que nos respeta y  nos reta intelectualmente, apasionado y entregado a sus cosas, sin ningún dilema mental, que quisiéramos que se nos apareciera a la vuelta de la esquina sólo lo encontraremos en historias de hadas, novelas, y películas de ciencia ficción, pues los defectos hacen parte de la condición humana sin distinguir género y el secreto está en buscar los imperfectos perfectos para cada quien. Aunque si leyó en alguno de los 6 tipos al man que está a su lado por favor apague y váyase.